miércoles, 1 de agosto de 2012

DEFINICION



1.- PREOPERATORIO 2.- TRANSOPERATORIO 3.- POSTOPERATORIO

PREOPERATORIO

Es el manejo integral del paciente quirúrgico en el periodo queantecede a la operación. Teniendo conocimiento para aplicar el sistema del proceso de enfermería con el finde facilitar un paso fácil y seguro portodo el periodo peri operatorio.

TRANSOPERATORIA

Inicia con la induccion de anestesia y termina al finalizar el acto quirurgico

POSTQUIRURGICO

Inicia una vez que el paciente egresa del quirofano e ingresa a la sala de recuperacion

CLASIFICACIÓN DE LAS CIRUGÍAS






La cirugía puede ser clasificada como mayor o menor, de acuerdo con la gravedad de la enfermedad, las partes del cuerpo afectadas, la complejidad de la operación y el tiempo de recuperación esperado.


El tiempo de recuperación, puede ser largo y exigir la permanencia en terapia intensiva o varios días de hospitalización. Luego de estas cirugías, existe un riesgo mayor de que se presenten complicaciones. En los niños, los tipos de cirugía mayor pueden incluir, entre otros, los siguientes:


  • Extirpación de tumores cerebrales.
  • Reparación de malformaciones óseas en el cráneo y la cara.
  • Reparación de cardiopatías congénitas, trasplante de órganos y reparación de malformaciones intestinales.
  • Reparación de anomalías de la espina dorsal y tratamiento de lesiones sufridas en traumatismos contusos graves.
  • Corrección de problemas en el desarrollo fetal de los pulmones, los intestinos, el diafragma o el ano.
  • Cirugía menor.
  • De tubos ("diábolos") de timpanostomía.
  • Reparación de hernias.
  • Reparación de fracturas de los huesos.
  • Extirpación de lesiones en la piel.
  • Biopsia de tumores.


Algunas cirugías, a las que son sometidos los niños se consideran menores. El tiempo de recuperación, es corto y los niños retoman rápidamente sus actividades normales. Generalmente, estas cirugías no requieren hospitalización y los niños retornan a sus hogares en el mismo día. Es extraño que surjan complicaciones con estos tipos de cirugía. Los ejemplos de los tipos más comunes de cirugía menor son, entre otros:



Cirugía Electiva


Son los procedimientos, que pueden ser útiles pero no esenciales, a los que el niño se someterá por decisión de los padres. Un ejemplo es la extirpación de marcas de nacimiento o la circuncisión en el bebé de sexo masculino.


Cirugía Necesaria
Son los procedimientos, que necesitan practicarse para asegurar la calidad de vida de su hijo en el futuro. Un ejemplo; es la realización de una fusión vertebral para reparar una curvatura severa de la columna vertebral. A diferencia, de la cirugía de emergencia, no es necesario realizar la cirugía necesaria de inmediato, por lo que usted tendrá tiempo suficiente para preparar a su hijo.


Cirugía de Emergencia o UrgenciaEste tipo de cirugía se realiza como resultado de una necesidad médica urgente, como en el caso de la reparación de una malformación cardíaca congénita que pone en peligro la vida o la reparación de órganos internos lesionados luego de un accidente automovilístico.

CUIDADOS DE ENFERMERIA EN EL PREOPERATORIO Y POSTOPERATORIOMEDIATO

PRE Y POST OPERATORIO

Cuidados en el preoperatorio:



Definición:

      Es unos de los tres momentos que componen al perioperatorio: preoperatorio intraoperatorio, postoperatorio.

      El preoperatorio tiene dos momentos, el mediato que empieza desde el momento en que el medico informa al paciente que su tratamiento medico es quirúrgico, en el cual el paciente puede o no estar internado, hasta las 24 horas antes de la operación en donde comienza el inmediato.

Cuidado de enfermería preoperatorio mediato

        ➢ Revise indicaciones médicas e identifique al paciente.

        ➢ Explique amable y cortésmente todo la preparación que se hará según el tipo de cirugía.

        ➢ Controle signos vitales, medida, peso, talla y observe estado de la piel.

        ➢ Tome muestra de exámenes indicados.

        ➢ Recibir el prequirúrgico, ECG, laboratorio y otros estudios.

      Valoración (siguiendo la secuencia del proceso de enfermería)

        a) Valore las condiciones psíquicas del paciente que ingresa para ser intervenida quirúrgicamente y a la familia frente a la operación, reconociendo temores y angustias.

        b) Valore las condiciones socioeconómicas del paciente y su familia

        c) Evalúe las condiciones físicas del paciente

        d) Determine el diagnostico del paciente, el tipo de cirugía que se realizara y las indicaciones especificas del medico cirujano.

        e) Evalúe la experiencia (si el paciente tubo cirugías anteriores)

        f) Evaluar la capacidad de compresión del paciente y la familia frente a la educación que se brinde.

        g) Evalúe funcionamiento vesical y habito intestinal del paciente.

      Educación al paciente y a la familia

        a) Se debe realizar educación en el momento adecuado ni demasiado antes ni muy cercano a la cirugía.

        b) Se debe informar como se realizara el proceso quirúrgico

        c) Enseña como cuidar al paciente después de la cirugía



CUIDADOS POSTOPERATORIOS  EN LA UNIDAD DE ENFERMERÍA 







OBJETIVO 


Conocer las intervenciones de enfermería encaminadas a ayudar al paciente a la 
recuperación física y psíquica tras la intervención quirúrgica, con la mayor rapidez, 
seguridad y comodidad posible. 


 DEFINICIONES 


El postoperatorio se divide en dos etapas: 
•  Postoperatorio inmediato: periodo que trascurre desde la salida del paciente del 
quirófano hasta su traslado a la Unidad de Enfermería. Oscila entre 30 minutos 
y varias horas. Habitualmente tiene lugar en las Unidades de Recuperación 
Postanestésicas (URPAs). 
•  Postoperatorio mediato o continuado: se inicia a la llegada del paciente a la 
Unidad de Enfermería. 


 CUIDADOS  POSTOPERATORIOS
  •  Recepción del paciente en la Unidad de Enfermería
  •  Acompañar al paciente a su habitación. 
  • Valorar el estado general del paciente: 
  •  Nivel de consciencia. 
  • Respiración: comprobar la permeabilidad de las vías aéreas. 
  • Coloración de piel y mucosas.
  • Acomodar al paciente en la posición mas adecuada, según el tipo de 


 FACILITAR UN ENTORNO ADECUADO

  •  Tanquilizar al paciente. 
  • Restringir las visitas. 
  • Evitar ruidos. 
  • Proporcionar una iluminación adecuada. 

Conocer la historia clínica: 



  • Tipo de intervención y hora de finalización de la misma. 
  • Tipo de anestesia (epidural, raquídea, general, local
  • Órdenes de tratamiento. 
  • Cuidados especiales. 
  • Hoja de registro designos vitales, analgesia administrada 
  •  Anotar los datos y cuidados relacionados con las necesidades alteradas, en la hoja del plan de cuidados y el resto de incidencias en la hoja de observaciones de enfermería. 


CUIDADOS GENERALES










 Respiración: 




  •  Fisioterapia respiratoria, si procede: estimular el uso del inspirómetro, ejercicios de respiración profunda, movilización de secreciones 
  • Aplicar oxigenoterapia si es necesario. 




 Nutrición e Hidratación: 




  • Administrar sueroterapia prescrita. 
  • Valorar la aparición de náuseas y vómitos. 
  • Detectar precozmente la distensión abdominal. Valorar  peristaltismo. 
  • Iniciar tolerancia de forma progresiva, según prescripción 
  • Realizar balance hídrico, si procede. 
  • Cuidados de sondas de alimentación enteral nasogástricas, eyunostomías.




Eliminación: 




  • Verificar que el paciente realiza micción espontánea dentro de las 6-8 horas siguientes a la intervención. Vigilar la retención urinaria. 
  • Aplicar los cuidados de la sonda  vesical, si procede. 
  • Vigilar cantidad, color y aspecto  de  la  orina. 
  • Verificar la eliminación intestinal. 
  • Vigilar la colocación del drenaje y la cantidad y aspecto del liquido drenado. 
  • Aplicar los cuidados de las sondas nasogástricas de evacuación (cantidad  y aspecto del drenaje). 




Movilización: 




  • Estimular al paciente a realizar ejercicios con los miembros inferiores, si no está contraindicado. 
  • Iniciar la movilización del paciente lo antes posible (levantar  el cabecero de la cama, levantar al sillón
  • Fomentar la deambulación precoz y progresiva. 




Reposo y  confort: 




  • Mitigar el temor y la ansiedad. 
  • Promover el descanso y fomentar el sueño, disminuyendo estímulos nocivos (ruido,  iluminación, etc.). 
  • Agrupar las técnicas de enfermería, en lo posible, para permitir períodos de descanso ininterrumpido. 
  • Realizar cambios posturales  al paciente  encamado. 




Higiene y  estado de la piel: 




  •  Ayudar al paciente a realizar la higiene corporal, valorando su grado de independencia. 
  • Aplicar los cuidados específicos de la herida quirúrgica. 
  • Mantener la mucosa oral limpia y húmeda. 




Control del dolor: 




  •  Valorar la intensidad y  localización del dolor según el PD-GEN-60 
  •  Administrar analgesia prescrita y valorar  la efectividad de la misma
  • Proporcionar y enseñar al paciente posturas antiálgicas, si es posible. 
  • Vigilar posibles signos de infección:
  •  Aparición de fiebre. 
  • Tumefacción, calor  y/o enrojecimiento de las heridas, puntos de inserción de  drenajes y  vías venosas.  
  • Presencia de drenado purulento. 
  • Dehiscencia de la herida. 
  • Dolor localizado o aumento de sensibilidad en la zona quirúrgica. 




 Educación para el alta. 




  • Dar pautas al paciente respecto a lo que puede y debe hacer. 
  • Proporcionar indicaciones sobre las actividades que tenga que llevar a cabo y sus limitaciones. 
  • Instruirle respecto a los hábitos higiénicos y dietéticos. 
  • Informar al paciente sobre los procedimientos y cuidados especiales. 
  • Informarle   sobre  la  medicación que debe tomar.









COMPLICACIONES POSTOPERATORIAS


COMPLICACIONES DE LAS HERIDAS

No hay cirujano que no tenga que afrontar el problema de las complicaciones que pueden presentarse en los pacientes que ha sometido a intervención quirúrgica. Estas posibles complicaciones están referidas a: dehiscencia de la herida, dolor de la herida, acumulación de suero, hemorragia, senos de las líneas de sutura, infección de la herida, cicatrices hipertróficas, queloides, even-traciones.

Hemorragia de Herida Operatoria

Ocurre más frecuentemente en pacientes hipertensos o con defectos de coagulación. El hematoma de las heridas es casi siempre resultado de hemorragia controlable por medios quirúrgicos. Una vez detectado, se debe reabrir la herida, identificar el o los vasos sangrantes y ligarlos. Otras veces es consecuencia de una hemostasia no muy prolija, antes de cerrar definitivamente la herida.

Acumulación de suero

Es frecuente en heridas que tienen un gran espacio muerto como las de las mastectomías o la de los pacientes obesos. Se las trata mediante la aspiración, o si es voluminosa, mediante una herida por transfixión en el punto más declive aplicando luego un dren con un apósito de compresión. La evacuación debe hacerse lo más precozmente, ya que con frecuencia son asiento de infección.

Dehiscencia de la Herida

La frecuencia de esta complicación varía mucho en función de cirujano, paciente y tipo de operación. En una herida abdominal, la dehiscencia total produce evisceración y la dehiscencia parcial profunda conduce a la eventración.

En la mayoría de casos de dehiscencia, se encuentra que los puntos han desgarrado el tejido. Posiblemente el error más frecuente que condiciona una dehiscencia sea el tensionar demasiado los puntos que van a estrangular los bordes suturados comprometiendo la circulación en esta zona, asimismo los puntos flojos o mal anudados, demasiados puntos, toma de muy poco tejido o material de sutura inapropiado, son otras causas de dehiscencia.

Senos de las líneas de sutura

Cuando el material de sutura no absorbible se infecta, se forma el llamado granuloma a cuerpo extraño, que se abre camino hacia la superficie y después de formar una pequeña tumoración fluctuante, drena material mucopurulento, estableciéndose de esa manera seno o senos en cuyo fondo se encuentra el material de sutura referido, que a veces es expulsado espontáneamente pero que la mayor parte de veces, requiere la introducción de una pinza de punta fina para explorar y extirparlo. De persistir el seno es preferible abrir la porción de herida comprometida, extraer todo el material de sutura que se encuentra en ese lugar y dejar la herida abierta para cierre por segunda intención.

2.    Infección

 


Las manifestaciones de infección de herida operatoria aparecen generalmente entre el tercero y décimo días del postope-ratorio, aunque con menos frecuencia pueden aparecer antes o después. El tejido celular subcutáneo es el más frecuentemente comprometido. La manifestación más frecuente es la fiebre, puede haber aumento de dolor en la herida así como edema y eri-tema.


Prevenir la infección de la herida operatoria es uno de los aspectos más importantes en el cuidado del paciente, esto puede conseguirse reduciendo la contaminación, con técnica quirúrgica limpia y suave, sostén de las defensas del paciente y a veces antibióticos.


INFECCIONES EN CIRUGIA


Se denomina infecciones quirúrgicas a todas aquellas que se originan por gérmenes bacterianos y/o por los hongos como consecuencia de un acto quirúrgico, presentándose la patología infecciosa en el periodo inmediato o mediato a la intervención.



La infección quirúrgica puede originarse en una cirugía séptica o en una cirugía aséptica. Puede ser endoinfección o exoin-fección, monobacteriana o polibacteriana, toxígena, micótica o mixta.


Síndrome infeccioso focal

Se produce cuando una asociación de gérmenes bacterianos, cocos grampositivos o gramnegativos o bien colonias monobac-terianas: estreptococos, estafilococos, piociánicos, aerobacter, proteus, etc. desencadenan la supuración de la herida operatoria. A esto se puede agregar las micopatías como simple asociación, o asociación más infección micótica: cándidas, aspergilus o mucor.

La etiología de la infección del lecho quirúrgico tiene relación, en la mayoría de los casos con el tipo de intervención y órgano o sistema afectado.

3.    Cicatrices Hipertróficas y queloides

Estas complicaciones pueden presentarse en heridas quirúrgicas o traumáticas, con más frecuencia en pacientes con piel oscura y en la mitad superior del tórax.

El tratamiento puede llevarse a cabo con infiltraciones locales de corticoides, algunos recomiendan la radiación temprana. Cuando el queloide es voluminoso, se puede resecar y hacer cierre primario de la herida, seguida de infiltración temprana de corticoides.

4.    Eventración

La Eventración puede deberse a un punto flojo o a uno que está demasiado apretado y ha estrangulado y cortado el tejido que engloba la infección o a una dehiscencia.

La reparación de estas eventraciones debe llevarse a cabo después de los seis meses por lo menos, la reparación temprana lleva a la reaparición del problema. Debe evitarse suturar los tejidos sometiéndolos a mucha tensión teniendo entonces que recurrir incluso a las incisiones relajantes. En ocasiones tal vez sea necesario recurrir al uso de malla de marlex.

5.    Complicaciones Hemorrágicas

Ocurren en el postoperatorio inmediato, cursan muchas veces en forma catastrófica llevando al shock hipovolémico lo que lleva a una reintervención inmediata. Otras veces es menos aguda y permite control adecuado de funciones vitales, administración de fluidos, etc. antes de reintervenir.

Las anomalías de la hemostasia deben ser identificadas en el preoperatorio.

La causa más común de hemorragia intra o postoperatoria en un paciente con historia clínica y examen físico negativos, además de pruebas de laboratorio normales, es la falla en la ligadura de vasos sanguíneos seccionados.

6.    Problemas Anestésicos




Las complicaciones de la Anestesia se manifiestan de distintas formas durante el periodo perioperatorio y pueden variar desde relativamente menores hasta poner en peligro la vida del paciente.

Embolia Gaseosa Venosa: cuando sucede en forma inesperada es muy peligrosa. Se tienen efectos generalizados en el sistema cardiopulmonar. Estos incluyen:

1.    Aumento de la presión arterial pulmonar,
2.    Disminución del gasto cardiaco,
3.    Aumento del espacio muerto,
4.    Edema Pulmonar,
5.    Cortocircuito con Hipoxemia,
6.    Embolias generalizadas.

Un suceso temprano es el aumento de la presión de la arteria pulmonar, causado por dos factores: la oclusión de arteriolas por burbujas pequeñas y la vasoconstricción pulmonar. En la interfase de las burbujas y las proteínas de la sangre se produce desnaturalización y hay agregados de neutrófilos que causan daños del endotelio. La combinación de hipertensión pulmonar y daño endotelial provoca edema pulmonar.

La detección de EGV puede lograrse en las siguientes formas:

a.    Cambios Doppler precordiales,
b.    Disminución del CO2 al final de la ventilación,
c.    Soplo de “Rueda de Molino”,
d.    Dificultad para respirar o tos,
e.    Arritmias cardiacas,
f.    Hipoxemia,
g.    Aumento del Nitrógeno al final de la respiración,
h.    Disminución de la presión arterial,
i.    Aumento de la presión de la arteria pulmonar,
j.    Ecocardiografía,
k.    Aspiración de aires de cánulas venosas.

El tratamiento de la EGV consiste en varias maniobras:

El paso inicial es inundar el campo quirúrgico en forma tal que se aspire líquido en vez de gas al sistema venoso. Después de taponarse, aplicar cera de hueso, o ambas cosas, a las superficies en carne viva para ocluir cualquier conducto vascular abierto.

El sitio quirúrgico debe ponerse por abajo del nivel de la cabeza para revertir la gradiente hidrostática. Cuando el sitio quirúrgico está en la parte superior del cuerpo, la posición de Trendelemburg puede ayudar a atrapar burbujas de aire en el vértice del ventrículo derecho, en lugar de que fluyan en la vía del flujo de salida pulmonar.

Puede ser útil el aumento en la velocidad de administración de líquidos intravasculares para conservar la función del corazón derecho en presencia de hipertensión pulmonar aguda.
También son útiles los Betaadrenérgicos (adrenalina e isoproterenol), no sólo para aumentar el gasto cardiaco, sino para disminuir la resistencia vascular pulmonar en caso de EGV.

7.    COMPLICACIONES DEL TRATAMIENTO PARENTERAL CON LÍQUIDOS

Hematoma

Cuando se usa la vía percutánea, la laceración de la pared venosa puede condicionar la formación de hematoma local. Éste ocurre generalmente cuando se usa aguja de bisel largo en vez de aguja de bisel corto que es lo recomendado. Se ponen de manifiesto inmediatamente cambios de coloración en los tejidos vecinos acompañados de tumefacción y para evitar que progrese este problema, basta con retirar la aguja y hacer compresión local por unos minutos, ésto cuando se canaliza una vena superficial. La lace-ración de la vena subclavia probablemente pase inadvertida, a menos que se forme un gran hematoma disecante hacia mediastino o cuello.

Extravasación de los líquidos administrados, se extravasan hacia los tejidos perivasculares, manifestándose por tumefacción y dolor en la zona. En la mayoría de los casos este líquido extravasado es grande, puede por comprensión producir isquemia y subsecuente lesión de los tejidos con necrosis, sobre todo a nivel de piel suprayacente.

Flebitis

La complicación más frecuente de la infusión intravenosa es la inflamación local de la vena usada. Sus manifestaciones son: dolor local, induración en el trayecto de la vena y a veces eritema suprayacente. Esta flebitis por extravasación ocurre más frecuentemente en los miembros superiores que se usan más comúnmente en terapia postoperatoria.

Flebitis séptica

La mayor parte de veces la flebitis no tiene relación con la infección local o general, y más bien es resultado de las soluciones químicas irritantes administradas. La flebitis séptica tiene relación definida con la infección y de no hacerse el diagnóstico temprano tendrá un pronóstico sombrío. La sospecha se robustece por el crecimiento de gran cantidad de bacterias en los hemocultivos, que indican un foco intravascular de infección. Detectada la flebitis séptica la sonda debe ser retirada con prontitud y establecer el tratamiento antiinfeccioso indicado.

Infección Local

Los gérmenes que infectan el sitio de entrada del catéter pueden ser gram positivos, en cuyo caso predominan los esta-filococos, o gram negativos, en cuyo caso los más comunes son los enteropatógenos. También está señalado que la cándida es causa de este tipo de infección.
El diagnóstico de infección en el sitio de entrada del catéter se hace por sospecha en un paciente con catéter permanente, en el cual se desarrolla un cuadro séptico sin ninguna otra causa manifiesta. Puede o no haber signos locales de infección. La aspiración y cultivo de la sangre del catéter puede manifestar gran cantidad de gérmenes si el catéter es la fuente de la infección.

El tratamiento consiste en extraer el catéter y limpiar localmente la herida, la mayoría de veces con esto es suficiente. Si hay signos de infección general debe instituirse tratamiento con antibióticos contra el germen causante.
Neumotórax

Las vías supra e infraclavicular para la introducción de sonda intravenosa pueden condicionar neumotórax, esto se debe a que la pleura apical se encuentra a sólo 5 mm de la pared posterior de la vena subclavia, después de que ésta ha pasado la primera costilla.
Producido el neumotórax, el paciente se queja de brevedad en las respiraciones y dolor en el tórax, se puede encontrar disminución del murmullo vesicular a la auscultación y también pueden haber algunos cambios en el mediastino. Luego de la aplicación del catéter debe tomarse radiografía de tórax para descubrir la posible existencia de neumotórax tempranamente.

Si el neumotórax es pequeño, será suficiente la toraco-centesis. Si ha ocurrido colapso pulmonar será necesario toraco-tomía con sonda.

Embolia de Aire

Puede ocurrir como resultado de orificio en la sonda de plástico o mientras ésta se inserta en el conducto venoso.

Se manifiesta por distensión de las venas del cuello, elevación súbita de la presión venosa, cianosis, disminución de la presión arterial, respiración rápida y superficial.
El tratamiento consiste en colocar al paciente en decúbito lateral izquierdo en la cabeza hacia abajo.

Si esto no basta, toracotomía con aspiración del aire con aguja.

Laceración de arteria o vena

La punción o laceración arterial rara vez produce dificultades importantes. La laceración venosa puede producir hematoma importante.

El tratamiento consiste en retirar la sonda y las medidas del caso según la región comprometida.

Lesión del Conducto Torácico

Puede ocurrir cuando se usa la vía supraclavicular para cateterizar la vena subclavia o la vena yugular externa o interna.

Tumefacción mínima del cuello con existencia de hidrotórax en el lado izquierdo suele señalar el diagnóstico. La aspiración pleural descubre un líquido amarillo turbio con gran contenido de triglicéridos y el predominio de linfocitos entre la población de glóbulos blancos del campo.

El tratamiento consiste en la extracción del catéter yugular y tratamiento conservador de la laceración al principio con reposo en cama, dieta pobre en grasas y aspiración repetida de tórax. Si no cede, tratamiento quirúrgico del conducto torácico bajo anestesia local.

8.    COMPLICACIONES URINARIAS Y RENALES

Retención Urinaria

En el estrés, el dolor en la anestesia general y raquídea, la liberación de catecolaminas aumenta. Se cree que los receptores alfaadrenérgicos del músculo liso del cuello vesical y la uretra son estimulados por estas hormonas, aumentando su tono por este mecanismo para terminar produciendo retención urinaria, la que se presenta con más frecuencia en varones de edad avanzada.

Insuficiencia Renal Aguda

La isquemia renal produce lesión de la nefrona, la duración e intensidad de la isquemia van a determinar la gravedad de la lesión. La cantidad de sangre que llega a los riñones después de una hemorragia es desproporcionadamente menor a la disminución del gasto cardiaco. La caída a la mitad de los valores normales de la presión arterial por hemorragia aguda condiciona casi una suspensión del flujo renal sanguíneo. Después del restablecimiento del volumen circulatorio y del gasto cardiaco, la vasocons-tricción renal persiste por un tiempo considerable.

La insuficiencia renal aguda según la causa primaria se clasifica en: prerenal, intrínseca y postrenal.

Las prerenales están relacionadas con el gasto cardiaco y el riego renal.
Las intrínsecas están condicionadas por la necrosis tubular aguda, la nefropatía por pigmento y nefrotoxicidad farmacológica.

La prevención es el mejor tratamiento de la insuficiencia renal aguda. Es indispensable evitar hipotensión, hipovolemia e hipoxia y si ocurren corregirlas de inmediato.

Establecida la causa, iniciar rápidamente las medidas correc-tivas para reducir al mínimo la lesión renal y evitar complicaciones mayores.

9.    COMPLICACIONES RESPIRATORIAS

Es fundamental mantener libre la vía traqueobronquial, porque atelectasia, neumonía, absceso y edema pulmonar suelen ser secundarios a obstrucción parcial o total de las vías respiratorias por las secreciones retenidas o aspiradas.

Atelectasia y Neumonía

Son numerosos los factores etiológicos, entre ellos: narcóticos que suprimen el reflejo de la tos, inmovilización postoperatoria prolongada, vendajes constrictivos, deshidratación, congestión pulmonar, aspiración de materiales extraños, debilidad de músculos respiratorios.

La neumonía ocurre después de atelectasia persistente.

En los fumadores o en los que sufren de bronquitis, la proporción de complicaciones es mayor, si el paciente deja de fumar cuatro o más días, esta proporción disminuye.

En la cirugía electiva la profilaxia debe empezarse por lo menos dos semanas antes de la operación. Es recomendable dejar de fumar, bajar de peso, mejorar el estado general, ejercicios respiratorios.

En el postoperatorio es importante la movilización temprana, estimular la ventilación, tos frecuente, cambios de posición, a veces agentes mucolíticos ayudan en la limpieza bronquial.

Absceso Pulmonar

Cualquiera que sea la etiología cardiaca, hipóxica o tóxica, se desarrolla un factor común, una obstrucción parcial o completa por el líquido de edema, de modo que estos pacientes mueren ahogados.

Para el tratamiento: sonda endotraqueal, aspiración, digitá-licos, aminofilina, restricción de líquidos, diuréticos, torniquetes rotatorios en las extremidades.

10.    COMPLICACIONES CARDIOVASCULARES

Embolia Pulmonar

Todo paciente incluido en el grupo de cirugía general, forma parte de un amplio conglomerado de pacientes por encima de cuarenta años, sometidos a cirugía abdominal mayor que pueden presentar esta complicación; pero también deben considerarse otros tipos de intervenciones: ginecológicas, urológicas, pulmo-nares, vasculares, mastectomías, etc. que están sometidas al riesgo de presentar como complicación una embolia pulmonar, teniendo como base a una trombosis venosa profunda.

En estudios practicados en Europa y USA mediante el uso del Test del Fibrinógeno Marcado, se ha detectado que un 25% de pacientes de Cirugía General presentaron trombosis venosa profunda. El promedio de incidencia de embolia pulmonar fue de 1,6% y de embolia pulmonar fatal el 0,8%.

Por eso se recomienda preventivamente tomar las medidas adecuadas para evitar esta complicación de suyo grave.

El uso de heparina sola o asociada a Dihidroergotamina y Heparina de bajo peso molecular han demostrado ser lo más efectivo en reducir la incidencia de trombosis venosa profunda y embolia pulmonar.